
María Rosa Tapia, Coordinadora General de Uniservitate, entrega al Papa el último libro Institucionalización
del aprendizaje-servicio publicado por el programa
Uniservitate acompañó a 170 representantes de universidades católicas de todo el mundo que participaron en Roma de un encuentro organizado por la Federación Internacional de Universidades Católicas (FIUC) en el marco del centenario de la creación de esa entidad.
El evento contó con el apoyo del Dicasterio para la Cultura y la Educación, cuyo titular, el cardenal José Tolentino de Mendonça, tuvo a su cargo la conferencia de apertura en la que se refirió al diálogo entre la Iglesia y la sociedad. Al inicio de dos jornadas de talleres y disertaciones sobre «el futuro de la Universidad Católica con ocasión del Centenario de la FIUC», la presidente de esa Federación, Isabel Capeloa Gil, destacó que encuentros como éste demuestran “la unidad de las universidades católicas nacidas en el corazón de la Iglesia».
Durante los encuentros los rectores, provenientes de 47 países, abordaron los desafíos y las cuestiones de gobernanza a las que se enfrentan las universidades en los diversos contextos en los que operan y compartieron reflexiones sobre el futuro de esas instituciones.
En representación de Uniservitate participaron su coordinadora general, María Rosa Tapia; Richard Brosse, portfolio manager “Vital Catholic Thought” de Porticus y Enrique Ochoa, director ejecutivo de CLAYSS. “La celebración de los 100 años de la FIUC nos permitió reencontrar a rectores con quienes venimos trabajando en la institucionalización del aprendizaje-servicio y reforzar nuestro compromiso para seguir colaborando en la consolidación de esta red internacional de universidades católicas”, dijo Tapia. Y agregó que “el espíritu de lo que buscamos a través del aprendizaje-servicio estuvo presente en la mayoría de las disertaciones y muy en la línea con el pedido del Papa a las universidades de salir al encuentro de la comunidad”.
En el segundo día del encuentro los participantes fueron recibidos por el Santo Padre en una audiencia privada en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico. Francisco les agradeció “por el bien que hacen nuestras universidades católicas: sembrar la ciencia, la Palabra de Dios y el verdadero humanismo”.

Representantes de universidades católicas se reunieron en audiencia privada con el Papa Francisco
en la Sala del Consistorio del Palacio Apostólico
En su discurso el Papa exhortó a las universidades a ser protagonistas en la construcción de una cultura de paz y a trabajar en red globalizando la esperanza, la unidad y la concordia, en vez de la indiferencia, de las polarizaciones y de los conflictos. “Hoy existen en el mundo casi dos mil universidades católicas. Imaginemos el potencial que podría desarrollar una colaboración aún más eficaz y operativa, fortaleciendo el sistema universitario católico”, dijo.
En otro tramo de su mensaje -que fue incorporado al Repositorio Uniservitate- el Santo Padre recordó que “un proyecto educativo no se basa solo en un programa perfecto, ni en un equipamiento eficiente, ni en una buena gestión corporativa” y que “no es suficiente conceder títulos académicos, es necesario despertar y custodiar en cada persona el deseo de ser”. Y agregó: “Es verdad que se debe pensar en la inteligencia artificial, pero también en aquella espiritual, sin la cual el hombre permanece un extraño para sí mismo”.
El Papa instó también a las universidades católicas a tomar posturas claras y “mancharse las manos evangélicamente en la transformación del mundo y al servicio de la persona humana”. A los rectores Francisco les pidió que ayuden a la Iglesia “a dialogar sin miedo sobre los grandes planteamientos contemporáneos” y “a construir alianzas intergeneracionales e interculturales en favor del cuidado de la casa común, de una visión de ecología integral que de una efectiva respuesta al grito de la tierra y al grito de los pobres”.
Cada uno de los presentes tuvo la oportunidad de saludar luego al Papa. A su turno, María Rosa Tapia le entregó el último libro de la Colección Uniservitate en el que, con aportes de referentes de este Programa de los cinco continentes, se aborda la institucionalización del aprendizaje-servicio. Para sorpresa de María Rosa cuando el Santo Padre recibió el ejemplar la miró y le dijo: “Están trabajando muy bien”. Un elogio que los coordinadores de Uniservitate quieren hacer llegar a todos y cada uno de los profesionales y estudiantes que hacen posible el fortalecimiento y crecimiento de esta red global.
